Re-unir, re-habitar. Laboratorio social de prácticas instituyentes es un proyecto artístico que se
articula en torno a tres de las problemáticas que se consideran impiden el desarrollo de una
cultura pública y democrática: la creciente burocratización de las instituciones públicas, la
precariedad laboral y la espectacularización.
Ante esto, se propone desplegar un programa de mediación inversa, que vaya de abajo hacia
arriba, desde los creadores, colectivos, agrupaciones y productoras a la institución; una alianza
entre agentes de distintos perfiles que propicie ensanchar el campo de la representación y sus
antagonismos, favoreciendo un espacio de debate que, en definitiva, busca ensayar otras
formas de relación entre la institución cultural y lo social.
En primera instancia, se plantea una amplia convocatoria de agentes entre los cuales
mapear de forma lo más precisa posible los conflictos y reivindicaciones existentes.
En una segunda fase, los colectivos y agentes convocados se agruparán según sus campos de
trabajo, afinidades temáticas, reivindicaciones sectoriales, para seguir afinando en la
localización de problemas al mismo tiempo que, en su caso, en el diseño de estrategias de
lucha y acción directa y acción artística. Cada una de estas mesas establecerá al menos una
acción que, como hemos aludido anteriormente, tengan un carácter artístico, además de
resistencia, que pueden ser paseos por el tejido cultural de la ciudad o realización de
cartelería, performances a pie de calle, etc.
La tercera fase propone, por un lado, un encuentro entre la institución y lo social donde se
pueda establecer una serie de compromisos por parte de las instituciones convocadas, y por
otro lado, un alzamiento de todo el material generado a lo largo del proceso que, a modo de
exposición, pueda hacer partícipe a la ciudadanía de la misma, además de constituir todo un
ejercicio de transparencia, así como una publicación que sirva como una especie de libro de
buenas prácticas, por el que las instituciones se obliguen y comprometan a iniciar procesos de
desburocratización, escucha y desprecarización.
